sábado, 19 de junio de 2010

Después de un Silencio, un buen reencuentro...


Sírculo andaba en un pequeño letargo, causado por las obligaciones naturales que tiene sus miembros. Pero ya estamos de vuelta! Una tranquila tertulia en la casa de nuestra querida Ingrid. Con una nueva fan del grupo: Rossángel. Por supuesto, Thiany y Carlos no podían faltar. Sin más preámbulos, les trancribo las respectivas reseñas de Ingrid y de Rossángel.

El grupo de lectura satánico

Rossángel – Hoy me cansé de tratar que mis amigos se reúnan a leer. Me puse a buscar en Internet grupos de lectura para saciar mi necesidad de leer que mis amigos no comparten. Encontré en Internet un grupo llamado “Sirculo”. Aceptan nuevos integrantes. Les voy a escribir a ver si me aceptan.

Ingrid - Hoy me llegó un correo: Resángela quiere entrar a nuestro grupo de lectura. Yo le respondí que con mucho gusto la aceptábamos y que nos reuniríamos en mi casa el próximo sábado. Llamé a Carlos para informarle que teníamos un nuevo miembro en nuestro grupo. Le comenté que nos había visto en Re-lectura y que me había escrito para ver si la aceptábamos. Le sugerí ir buscando el libro que habíamos acordado leer para ese mes.

Rossángel – Ya me contestaron y me aceptaron sin mas ni mas. Que extraño! Sera un grupo verdaderamente sano. Porque me aceptaron tan rápido? Me puse a averiguar sobre los integrantes. Los busque uno por uno en Facebook. La mayoría no tiene foto. Me parece extraño. Será un grupo satánico escondido detrás de un grupo de lectura. Tendré que tomar mis previsiones. Voy a averiguar donde se reúnen y pasaré para ver el lugar. Me llevaré a mi mamá y a mi tía para que sepan donde estoy y tomaremos precauciones.

Ingrid – Le escribí a Carlos para decirle que nuestra nueva integrante está muy interesada en entrar al grupo, me pidió la dirección y cuando nos reuniríamos. Que ya compró el libro y lo está leyendo. Estoy contenta, siempre nuevas personas quieren integrar al grupo, pero después de la primera vez, no regresan. En fin, espero que esta sea más constante Le dije que el domingo nos reuniríamos. Carlos puso la hora muy temprano, así que tendré que apurarme a limpiar la casa para recibirlos.

Rossángel – Tengo todo planeado. Me voy con mi tía y con mi mamá, nos vamos temprano para captar la zona. Luego llego a la puerta con ellas para ver quién me recibe y como se ve la cosa. El teléfono en mano por cualquier emergencia. No me llevo la cámara. Capaz de que sea un grupo de gente que reúne a extraños para robarle. Solo el celular para cualquier emergencia

Ingrid – Hoy es sábado y tengo mucho que hacer. A las dos nos reunimos tengo mucho que hacer. A la una me llama Rosangela que no encuentra la casa, que está perdida. Yo un poco molesta porque aun no termino y ya alguien está buscando la casa le digo de mala manera que se pasó la casa. Que está muy arriba de la calle, que tiene que bajar, pero que la reunión es a las dos de la tarde que aun no hay nadie por aquí. Llamo a Carlos y le pregunto dónde está y me responde que va a llegar tarde porque tiene una emergencia. Molesta le hago notar que estoy sola en la casa y que tres personas pasan en un carro amarillo varias veces en frente de la casa. Que no las conozco y que él debe estar a la hora para acompañarme. La situación del país está como para tomar precauciones.

Rossángel – Solo le pregunte la dirección exacta y me respondió que es muy temprano aun un poco molesta. Creo que esto no es un grupo de lectura sino otra cosa. Bueno mama, vamos a dar una vuelta, ya vi la casa y a las dos entramos las tres para ver de que se trata.

Ingrid – Termino y me voy a dar un baño rápido, ya que afuera esperan. Estoy molesta que me hicieron correr el sábado y nadie del grupo piensa llegar temprano y estas que son nuevas ya están en la puerta media hora antes. Me visto y salgo a recibirlas. Una de ellas decide entrar sola y le dice a las otras dos que todo está bien. Que no se preocupen que ella las llama cuando termine. Entra con precaución y cautela. Observa todo. No sé que busca. Le digo que se siente en la terraza que ya están por llegar los otros del grupo.

Rossángel – Todo parece estar bien. Se ve una casa decente y una mujer buena. Creo que no es un buen grupo después de todo. Espero en la terraza y después que todos llegan les cuento el miedo que tenía de llegar a reunirme con mi supuesto grupo satanico de lectura.

Ingrid Melizan



Sí es posible un club de lectura en Caracas

En Búsqueda de un lugar donde compartir mis ideas, me surgió la necesidad de participar activamente en un espacio de intelectualidad. En ese indagar me encontré con la página "relectura"allí estaba Sirculo con S. Ingrid la anfritiona me aceptó, y muy complacida asistí expectante a la reunión del sábado. Tengo que admitir mí incertidumbre, usualmente no se va a la casa de alguien desconocido, sin embargo el instito zodiacal de nosotros los picsianos me guió.

La casa del encuentro es acogedora, amplia y un jardín resplandeciente muestra de un cuidado riguroso. Dentro de las anécdotas más importantes tengo que contarles que el hermano de Ingrid, es facinante nos hizo reír con sus ocurrencia y su fiebre por el equipo de fútbol, Real Madrid, jejejeje.

El libro escogido para la tertulia fue " El precio de la pasión" por cierto muy malo ¡ No lo compren! discúlpame Suzan, autora, pero es la realidad, todos al unísono compartimos esa idea y a pesar de que ese fue el motivo de la reunión, cuando los saberes se juntan esa excusa queda de un lado porque la conversa giró entorno al viaje de Ingrid por Atenas, la cultura Vinícola de Carlos, nuestra cotidianidad, lecturas interesantes y las oportunas intervenciones de Thianny, Carlos y las mías. Ah pero no crean que esto fue hablar y hablar también deleitamos nuestro paladar con dos vinos; uno chileno y argentino.

Muchas gracias a los Sirculeros por la invitación, este es un grupo intelectual que irá creciendo porque los que quieres ser o ya son intelectuales siempre se juntan ¡Vamos adelante lectores!

Rossangel